Santuario de Ntra. Sra. del Valle
La devoción a Ntra. Sra. del Valle comienza en Manzanilla en el siglo XV. Situado en el vado de San Nicolás, a las afueras de Manzanilla, cuenta la leyenda que el animal que transportaba la imagen de la Virgen desde Sevilla se quedó paralizado al pasar por el enclave donde se sitúa el santuario.
La ermita primitiva era tan pequeña que cuando se hacía misa solamente cabían el sacerdote y algunos ministros, pero a principios del siglo XVIII fue agrandada gracias a Don Gonzalo José de Osorno, Canónigo de la Catedral de Sevilla.
Las tres portadas de su fachada dan acceso al interior, con planta de cruz latina. Un crucero con bóveda semiesférica y un presbiterio forman un conjunto con una belleza acorde a la titular del santuario, que brilla en el camarín expresamente hecho para ella.
Ayto. de Manzanilla